Hasta que los cuervos se comieron los ojos.
No te muevas... No respires... No permitas que ellos escuchen tu corazón latir.
Vámonos de aquí... estas tumbas tienen un aspecto siniestro.
¡Oh! Me siento culpable.
- Ella trabaja con marionetas. - Maniquís, ¡guapa!
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